Después de ocho meses de mantenerse alejado de la vida pública, el expresidente Andrés Manuel López Obrador reapareció este domingo para participar en la histórica elección judicial del 1 de junio. En un gesto simbólico que refuerza su respaldo al nuevo modelo de justicia impulsado durante su sexenio, acudió a votar en una casilla cercana a su rancho “La Chingada”, en Palenque, Chiapas.
Vestido con su característica guayabera blanca y con semblante sereno, López Obrador se presentó ante la ciudadanía con una hoja de papel en mano, donde llevaba apuntados los nombres de sus candidatos, lo que generó comentarios entre presentes sobre la influencia persistente del líder morenista.
En un breve encuentro con medios de comunicación, el exmandatario calificó la jornada como un paso trascendental para la democracia mexicana, al celebrarse por primera vez la elección directa de jueces y magistrados. Aprovechó también para elogiar el papel de la presidenta Claudia Sheinbaum, a quien describió como una líder excepcional.
Durante su retiro, ha estado escribiendo un nuevo libro de historia, el cual —según adelantó— podría estar listo para finales de año. Su aparición pública no solo marca su regreso momentáneo al escenario nacional, sino también el eco de su legado en uno de los procesos más controvertidos de la justicia mexicana.
